domingo, 8 de junio de 2008

Perfexión

¿Qué me hace pensar que soy mejor que los demás?

Soy médico y debo infelizmente creerme el cuento… la mayor parte del tiempo, involuntariamente, tiendo a pensar que soy mejor, más ducho, o que al menos en una situación dada yo podría tomar una mejor decisión o actuar mejor que otros con una arrogancia que no tolero. Al pensarlo desecho el orgullo y por suerte la humildad aflora y supera, pero el pensamiento no deja de existir… aminora.
Esto también se aplica en otras instancias como al momento de escoger pareja, en este caso menos, aunque a veces me siento en ventaja, en la posición de criticar... ¡Insólito! Irreal, estúpido y arrogante.
Al mismo tiempo y casi contradictoriamente me considero feo, desgarbado, no me preocupo demasiado de mi apariencia, sin describir acá la montonera de defectos, pifias y complejos... Y sin embargo repito me siento en la posición de criticar.
Me he fijado que, en mi pareja, busco los detalles que en mi encuentro feos... algo así como el equilibrio, mi yang. Por "anticoincidencia" también encuentro lindo y tierno detalles que la mayor parte del tiempo, las mujeres detestan en si mismas... vaya a saber porque (tarea para la casa).
La cosa es que debo incorporar de una vez por todas, que perfección no existe, no existe en los demás, y muy lejos está de mí, más aún si persisto en esto. Lo que si es real es el equilibrio, tolerancia, aceptación.

Excelencia sí, arrogancia no.

Quizás perfección… pero sólo en el encuentro de dos imperfectos, hechos uno para otro.

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